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Compramos los zapatos de moda, los más exclusivos posible, los que más nos llamen la atención, a veces para calzarlos en fiestas, reuniones o incluso para llevarlos a diario al trabajo y causar sensación entre los compañeros. Siendo indiferente el uso que queremos darles, coincidimos en afirmar que, el aspecto que deben tener en cada ocasión debe ser simplemente perfecto, como sí lo acabásemos de estrenarlos. Para ello, debemos acogernos a las recomendaciones de los expertos en cuanto a limpieza y mantenimiento, sobre todo, siempre en función del tipo de material en el que esté fabricado nuestro modelo.

En este artículo le hacemos las siguientes propuestas para conseguir unos zapatos perfectos más tiempo:

 

Limpia y cuida tu calzado

Lucir zapatos impecables es fácil y poco costoso sin embargo nos solemos ocupar poco de ellos, a pesar de que nos llaman mucho la atención a la hora de determinar el look de una persona el estado de sus zapatos, un estado de éstos descuidado nos suele dar la sensación de dejadez, cosa que a lo mejor no observamos con cualquier otra prenda.

En relación con su cuidado vamos a centrarnos en el calzado más utilizado, que suele ser el de cuero tradicional, éste material, tiene una característica muy especial, necesitan estar hidratados, por ello, utilizaremos algún tipo de cera específica tras terminar de retirar los restos de polvo en seco. Es decir, el primer paso, será retirar todos los restos que se han quedado pegados durante su uso, con un cepillo suave, para conseguir un aspecto limpio y brillante y prolongar así su vida útil, se aconseja pasar un paño seco una vez se ha cepillado para acabar de retirar el polvo y para terminar se añade la hidratación, un paso que no debemos olvidar ya que esa grasa además de dar brillo, protege la piel de las inclemencias del tiempo, tato del sol excesivo, como del agua.  En el mercado podemos encontrar distintos tipos de productos adecuados para cada tipo de zapato, es importante elegir bien los productos de limpieza, dejándose asesorar por los profesionales y no buscando el más barato.

 

Destinar un calzado para cada ocasión

Elegir un zapato adecuado para la actividad, es esencial para no perder un look perfecto, pero tampoco hacernos daño en los pies, debemos evaluar las características de nuestros zapatos y destinarles un fin según estas. Un ejemplo de ello son los zapatos de salón de tacón medio, son unos zapatos elegantes que podría encajar en casi cualquier situación, pero podemos utilizarlos mejor para nuestro día a día en la oficina, ya que nos ofrecen un look elegante a la par que cómodo, pero  seguro que a nadie se le ocurriría llevarlos para hacer deporte, por muy cómodos que nos resulten ya que podríamos lesionarnos, pues ese mismo planteamiento nos vale para no llevar los mismos zapatos a fiestas y cocteles más formales, debemos aprovechar esos momentos para darles un toque más sofisticado a nuestros pies, ya que no vamos a necesitar estar demasiado tiempo de pie y de paso dejamos descansar en casa nuestro calzado estrella.

El uso prolongado del mismo calzado provocará sudoración, que conseguirá que la piel del calzado se debilite y provocando mal olor en los pies. Es necesario la ventilación del calzado, en ocasiones tendremos que utilizar desodorantes que ayuden a su eliminación, pero en otras será suficiente con oxigenar y dejarlos en desuso al menos 24 horas.

 Esta sudoración a veces podría dar lugar a la aparición de hongos, y otro tipo de bacterias que deberán tratarse para evitar su prolongación. Como hemos comentado anteriormente, el uso prolongado de un mismo zapato también afectará al deterioro de este, adquiriendo así un aspecto más envejecido y reduciendo su vida útil. Para evitar esto intentaremos ir intercalando distintos pares para que tanto pies como zapatos descansen.

 

Elegir la talla correcta

Es importante no comprarse zapatos al finalizar el día, porque los pies se encuentran ya hinchados, y no sabremos cómo de ajustados nos quedan en realidad. Es un grave error pensar que un zapato que no nos queda cómodo en la tienda, con el uso se ajustará mejor al pie, ya que probablemente no sea así. Es cierto que un material de buena calidad tiende a adaptarse a nuestro pie y con el uso lo notaremos más cómodo, pero desde el primer momento en el que lo probamos debemos poder caminar con el sin problemas, si no es así debemos cambiar de talla o incluso de modelo.

 

Elegir la ocasión para estrenar un calzado

Como ya hemos recordado un buen calzado es más cómodo cuando se adapta, por tanto, el momento de estrenarlo, no debe ser nunca el evento para el que lo hemos elegido. Si estrenamos zapatos es importante no calzarlo más de 2 o 3 horas seguidas, sobre todo si realizamos una actividad fuera de casa y que no nos permita su sustitución, por ello podemos comenzar usándolos en casa siempre que no realicemos actividades con productos que puedan mancharlos, después podemos usarlos un día simplemente para salir a cenar, y listo, ya tendremos tanto el pie como el zapato adaptados, para utilizarlos sin dolor en cualquier fiesta.

Como conclusión, podemos decir que n general, para alargar la vida útil de un zapato, necesitamos un mantenimiento mínimo del mismo, ya sea con un paño seco o con alguna cera específica, oxigenar el calzado cuando el uso haya sido prolongado, elegir el zapato adecuado para cada actividad que vayamos a realizar y elegir bien la talla.

Saber elegir bien el zapato que vamos a comprar en función del uso que vayamos a darle, es una costumbre muy sana que nos hará consumidores responsables y con una idea clara de lo que queremos y necesitamos. Buscamos un diseño, que nos ayude a lucir un look perfecto, pero también buscamos calidad y comodidad. Los zapatos realizados artesanalmente en nuestro país nos ofrecen estas tres cualidades, por eso les invitamos a la página de José de Mora, en la que seguro podrá encontrar lo que busca.


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